Además de los Bonos Sociales, existen otra serie de ayudas económicas destinadas a colectivos vulnerables para paliar situaciones de vulnerabilidad energética.
Es una prestación económica periódica, destinada a cubrir gastos tanto asociados a las necesidades básicas como derivados de un proceso de inclusión social y/o laboral, cuando las personas no disponen de ingresos suficientes.
Es una prestación económica no periódica dirigida a personas con recursos insuficientes para afrontar gastos específicos, de carácter ordinario o extraordinario, con el objeto de prevenir, evitar o paliar situaciones de marginación social. Una de sus líneas se corresponde con gastos de energía (suministro eléctrico, gas y otros combustibles de uso doméstico), con ayudas de hasta 900 euros anuales.
El Departamento de Empleo y Políticas Sociales de Gobierno Vasco mantiene un convenio contra la vulnerabilidad energética con la Cruz Roja destinado a familias que no cumplen los requisitos para acceder a las AES o a la RGI. A través de la entidad, pueden percibir ayudas para abonar las facturas de luz, agua y gas.